21.2.09

MÁSCARAS

Ayer acompañé a mi abuela a cobrar a las rancherías (las mercancías que ella vende a los pobladores de esta zona tan alejada de cualquier centro urbano), presencié estupefacto el modo de ser de estas personas tan amables.
Mi abuela, cincuentona, tenaz y fuerte, les ofrece desde florida ropa de vestir, acampanados pantalones, fustes, hasta juguetes de hojalata y deliciosos dulces tradicionales.
Cuando llegamos al caluroso lugar, las polvorientas y solitarias calles, nos dieron la bienvenida. Un poco más tarde, mi 'panza' comenzó a dar lata y el almuerzo madrugador ya quería salir tempranamente de mi estomago. Este asunto nos hizo separarnos. Por mi parte, solicité permiso de entrar a una aromática letrina y mi abuela se dirigió a cobrar.
Ya más ligero, con la libertad que obtuve al separarme de mi apreciable ancestro, me dí a la tarea de recorrer el que yo creía un insignificante pueblucho (pues es lo que he aprendido de la escuela a donde voy, a despreciar lo nuestro). A un lado de la iglesia estaba una multitud jugando al "palo encebado", otros jugaban lotería o comían con 'los agachados' del mercado o bien, compraban en el tianguis.
Pero lo que sí me atrajo inmediatamente fue el grupo de danzantes y músicos que animaban la algarabía.
Había muchos individuos que no eran danzantes pero portaban máscaras, porque todos los que danzaban portaban un atuendo y una máscara; unos con sombrero y otros no.
Lo que no me explicaba era el uso de la máscara. ¿Por qué? ¿para qué?.
De pronto, recordé algunos textos que había leído con anterioridad sobre las máscaras, la génesis de la civilización y la cultura.
Poco a poco comenzaron a llegar en forma de recuerdo dichos textos que decían que la máscara en un nivel puramente físico sirve para cubrir los verdaderos rostros de quienes los usan. O sea, el rostro es cambiado por un dibujo de una cara artificial y procede de la tradición y la imaginación de los artesanos fabricantes de máscaras.
Cuando íbamos llegando al pueblo cerca del cementerio, casi a la entrada, vimos un taller de artesanos que trabajaban, al aire libre: el barro, el metal, el cuero y elaboraban máscaras.
El hecho de cubrir el rostro es algo mucho más profundo que un simple disfráz, porque para la cara misma, tiene un amplio significado de lo que ésta representa. Muchas culturas han igualado el rostro humano con la persona y la individualidad. en las culturas aborígenes se da mucho la relación directa entre la cara y el alma. El término "rostro" para muchas culturas aborígenes, representa el ego e individuo que transgiversa el concepto del mundo de esas culturas, porque para ellos el mundo era la nada o bien, podía ser separado en aspectos espirituales (su mundo).
Luego de recordar ésto, seguí precenciando las representaciones y los bailes de la calle; fluyó por mi mente la frase del Pablo Neruda : "Con la mirada perdida y no obstante existe... y siendo y no siendo" o la de Octavio Paz: "Es la mirada que no mira y mira". Estas frases se referían a la máscara.
¡Vaya!. ¡Cuanta variedad y que especiales se veían todas esas máscaras!.
Sentí que las máscaras nos hacían vivir un universo aparentemente extraño. Creí alucinar que frente a nosotros surgían criaturas ajenas a este mundo con apariencia de seres vivos: demonios terribles y amenazadores, dioses increibles, seres estrambóticos o juguetes, héroes de leyendas fabulosas.
El misterio de la máscara es la supervivencia de mitos milenarios, de antiguas tradiciones, de viejas civilizaciones. Una máscara es un puente tendido entre el mundo espiritual del más allá y el mundo natural de nuestra vida cotidiana.
Estaba como hipnotizado viendo las danzas y representaciones; pensaba al respecto, por el impacto aturdidor de encontrar estas manifestaciones de la expresión del sentir de un pueblo que se identifica con ciertas creencias comunes...
Me dí cuenta que uno de los propósitos esceciales de la máscara es la creación de símbolos.
En este caso los mitos tienen un doble aspecto: el conceptual y el perceptual; este último desarrolla la conciencia humana.
La máscara se ha convertido en vehículo de leyendas populares, tradiciones, festividades nacionales que expresan sentimientos humanos, pasiones, traumas históricos.
Las máscaras se mezclan con el folclore, con los ritos, las ceremonias sociales y forman parte del contexto histórico y social de un pueblo.
Es ineludible que la máscara se encuentra en la mayoría de las culturas que habitan este mundo. En todas las épocas.
Máscaras de toda índole, ceremoniales, rituales, funerarias, mágicas; abundan en los pueblos africanos, hidúes, tibetanos, polinesios, esquimales, indios apaches e indios de México, etc.
Esto indica que el hombre en su peregrinaje por el mundo, se ha afanado por decubrir su personalidad y que la manifiesta en una infinita gama de expresiones, pero esto no es suficiente para satisfacer su necesidad de sentir y no sentir, aunque sea transitoriamente; esto ocurre en el artificio de la máscara.
Desafortunadamente, al pasar el tiempo, la máscara va perdiendo su carácter mágico, esotérico (contenido), en la misma medida en que el mito, la tradición o la conseja se hunden en el olvido.
Hoy día, mucho de la función ritual y ceremonial ha cambiado por lo teatral, lo carnavelesco. La magia se ha convertido en arte.
La aparición de la máscara en lugares diferentes y muy separados entre sí, se remonta a los albores de la historia del hombre. Resulta imposible determinar con presición, en el espacio y en el tiempo, su origen. Pero atestiguan su existencia en tiempos remotos hallazgos rupestres y arqueológicos.
La práctica y uso de máscaras fueron usadas para el culto a los muertos en los ritos funerarios. Aparentemente, las primeras máscaras fueron usadas para el culto a los muertos en los ritos funerarios...
La fiesta popular continuaba y yo también seguía extasiado. También seguía en la incógnita del significado de la máscara, me parece que el vocablo castellano proviene del árabe "macjara" que significa bufón, pero ya más ampliamente indica rostro falso o postizo. La máscara viene a simular un objeto para dar a entender algo distinto a lo que es.
Me dá la impresión que la máscara es un instrumento y un medio para resguardar o asegurar la supervivencia humana frente a la naturaleza abrumadora e incomprensible. También la máscara es usada para influir y dominar a espíritus maléficos o benéficos en provecho o detrimiento de la comunidad.
Se puede abundar que el uso de las máscaras tiene tres funciones:
1) Cuando su uso no es voluntario sino impuesto. Esto era realizado por las civilizaciones primitivas, donde el portador creía absorver los poderes de lo representado por la máscara a través de una suplantación o la identificación.
2) Cuando es voluntaria y selectiva su utilización. Aquí el portador pretende, aunque sea de manera temporal, lograr la esencia del ser representado por la máscara y expresa su deseo de apropiarse de valores ajenos.
3) Como encubrimiento. Aquí la máscara es usada para liberar una serie de actos reprimidos por los patrones sociales.

Por otra parte, el uso de las máscaras es característico de las creencias religiosas primitivas, tales como el animismo, el totemismo y el shamanismo.
La humanidad a lo largo del tiempo siempre ha manifestado una actitud animista. Las sociedades primitivas atribuyen sus éxitos y sus fracasos a poderes misteriosos, omnipresentes, capaces de cambiar el curso de la vida. Entonces, creían que las cosas estaban animadas por espíritus y esa creencia lleva al deseo de conciliar o apaciguar esas fuerzas mediante actos mágico-religiosos.
El totemismo se efectúa cuando se toma como protector de un grupo o del individuo a un objeto de la naturalezao un animal y a veces como ascendente o progenitor.
El shamanismo es cuando se piensa que el individuo es el catalizador de fuerzas espirituales externas y que es capaz de convertirse en intermediario entre la colectividad y los espíritus de la naturaleza.
Es por eso que es común en todos estos rituales, la máscara materialice estas fuerzas naturales y las transmita al portador, convirtiéndolo en elemento esencial para el desarrollo de los rituales y así adquiere valor en su contexto cultural.
Me dí cuenta que cuando la costumbre festiva cristiana usa máscaras, es solo para representar un hecho religioso o moral. También es evidente la gran calidad artesanal en la manufactura de las máscaras en general. Se trata de todo un derroche de creatividad...
...Pero pensándolo bien, ¿por qué he profundizado tanto?, ¿que es lo que me pasa?, ¿por qué de pronto muy 'sabihondo' y evocador de recuerdos didácticos?, ¿se trata acaso de un delirio?...
-¡Ea! ¡Despierta, hey.despierta!. ¡Juan despierta!. ¡Estás hablando dormido, Juan!.
- ¿Qué? ¿qué pasa?, ¿dónde estoy? ¿eh...?
- Calma Juan, Sucede que te dió tifoidea hace dos dias justo cuando llegaron a San Quintín, ibas con la abuela. Iban a cobrar. ¿Qué? ¿a poco no te acuerdas?
- No Pancho, no es eso, pero olvídalo. Híjole, ¡cómo me duele la panza!...Agh.